No solo quienes conducen un vehículo deben ser conocer y respetar las normas de circulación en los espacios públicos.
Desde un peatón a un conductor profesional todos deben de conocer cómo comportarse adecuadamente en la vía pública, para poder interactuar en forma pacífica y transitar en 
armonía.
Es importante que todos los actores que intervienen en ella conozcan cómo está compuesta, a qué elementos hay que prestarle atención y de qué manera se debe circular.
El ser consciente de ello permite a todos transitar de forma segura y eficiente. Lo cual es posible mediante la adecuada interpretación del lenguaje existente en la vía pública (sentidos, preferencias, mensajes, etc.), así como la comunicación con otros usuarios de la misma (señaleros para indicar giros, cambios de carril, etc.).
La educación vial es una herramienta fundamental en la vida de toda persona, que debe comenzar desde pequeños para generar adultos conscientes y responsables.
Cuanto mayor sea el grado de educación y consciencia vial, más seguras serán las calles y rutas de transitar.
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Flamante Conductor 